La crisis humanitaria se está agravando” en los campamentos de Tindouf, señalan las agencias de la ONU. “Los resultados preliminares de una reciente encuesta nutricional realizada por los campamentos de refugiados saharauis de Tindouf, Argelia, muestran un grave deterioro del estado nutricional de la población refugiada, especialmente entre los niños y las mujeres. Estos resultados hacen temer una posible emergencia nutricional en una de las situaciones de crisis más prolongadas del mundo”, advierte la organización mundial.
“La tasa global de desnutrición aguda (GAM) alcanza el 13,6%, la cifra más alta observada desde 2010.
Y según los estándares de la OMS (Organización Mundial de la Salud), el GAM ha alcanzado niveles críticos”.
Esta crisis humanitaria “pue en peligro la salud y la supervivencia de los niños menores de cinco años.
Uno de cada tres niños sufre de retraso en el crecimiento, lo que sugiere desnutrición crónica. Además, el 65% de los niños y el 69% de las mujeres en edad fértil y que no están embarazadas tienen casos de anemia. Otro hecho alarmante es que solo el 25% de los hogares se benefician de una alimentación considerada aceptable”, advierten las Naciones Unidas.
Esta observación se produce cuando los donantes tradicionales del polisario ya no se apresuran a la puerta para enviar ayuda. “Solo se ha movilizado el 34% de los 103,9 millones de dólares necesarios para el Plan de Respuesta a los Refugiados Saharauis (2024-2025, ndlr)”, reconoce Savina Ammassari, coordinadora residente de las Naciones Unidas en Argelia.
Las agencias de la ONU no tienen ningún papel en el proceso de recepción, transporte y distribución de la ayuda humanitaria destinada a la población de los campamentos de Tindouf. Como recordatorio, Marruecos, a través de su representante permanente ante la ONU, Omar Hilale, había denunciado repetidamente el malverso masivo y sistemático por parte de los líderes de polisario de la ayuda humanitaria destinada a las poblaciones de los campamentos de Tindouf